¡Qué bueno es dejarse llevar! Dibujar sin expectativas ni propósitos, solamente que los materiales fluyan.
Este personaje surgió de un ejercicio durante las clases de dibujo e ilustración que estoy impartiendo los martes por la tarde en Madrid, academia de Arte. Teníamos que probar como interactúan entre sí varios tipos de acuarela, tinta china, tempera y rotuladores. Después, sobre las pruebas, teníamos que encontrar un personaje y definirlo. Yo encontré esta extraña cara demoníaca.
Todavía quedan plazas disponibles, para más información e inscripciones podéis escribir a info@madridacademiadearte.com
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